La estatua original se encontró en los Horti Lamiani (los Jardines Lamianos) romanos, en la colina del Esquilino, en 1874. Se trata de una imagen de Venus, desnuda, recogiéndose el cabello, tras el baño. Aunque la figura ha perdido sus brazos, los restos de los dedos de su mano izquierda pueden verse sujetando el moño.
La escultura sigue el modelo de representación conocido como Venus Anadiómene o Venus surgida del mar. Según una de las versiones sobre su nacimiento, la diosa Venus-Afrodita surgió de la espuma del mar. Esta espuma se formó alrededor de los genitales castrados del dios Urano, lanzados al agua.
Sin embargo, hay un pequeño detalle que da a la figura un aire de misterio. Sobre las paredes de la vasija que aparece a los pies de la diosa se enrosca una serpiente. Hay investigaciones que ven en esta serpiente una referencia a Egipto. Y, más en concreto, a la famosa Cleopatra.