La estatua original del Apolo del Belvedere formaba parte de la colección privada del Cardenal Giuliano della Rovere. En 1503, el Cardenal se convirtió en el Papa Julio II y la estatua se trasladó al Vaticano, donde sigue encontrándose hoy en día.
La figura representa al dios griego Apolo. Era el hermano mellizo de la diosa Artemisa. Apolo era dios de la música, la poesía y las matemáticas. Se relacionaba con las ideas de la belleza, de la mesura y el orden. Presidía el santuario de Delfos y allí era el dios de la adivinación. Cuenta la mitología que para gobernar el santuario tuvo que matar primero a la serpiente Pitón. Se cree que esta estatua pudo representar a Apolo disparando a la serpiente. Además de llevar flechas a la espalda, parece que en su mano izquierda pudo sostener un arco.